Tu filo

Estoy parada sin saber a donde ir o que hacer, la cabeza me da vueltas y el cielo se cae a pedazos, tengo miedo, tengo rabia; mi mente esta descontrolada y una nueva crisis se siente venir, la frase de siempre resuena en mi cabeza y mis manos comienzan a temblar presintiendo lo que viene. Siempre es lo mismo sangre, lagrimas y gritos ya no sé como reparar los trozos de cielo que caen sobre mi, ya no sé como huir de ese pedazo afilado que me seduce mostrandome como botar toda esta presión que me hace estallar... el miedo cobra vida en cada una de mis terminaciones nerviosas al igual que la adrenalina, el tiempo corre y estoy sola llorando mirando como el filo de la navaja me invita a desaparecer

Stop!

Necesito decir Stop! y bajarme de este juego ahora, las vueltas han sido muchas, el mareo ya se siente y las consecuencias ya se ven, la sensación es deliciosa la adrenalina fluye por cada vena, por cada poro como un ser invisible soltando seducción, pero ya nada es claro, de nada estoy segura no puedo ver, oir, sentir o hablar con lucidez, mis pies ya se sienten cansados de intentar frenar y mi mente sólo quiere colapsar hasta que ya nada en mi pueda funcionar. Es dificil alejarse de la demencial provocacion que es esta montaña rusa en donde en cada vuelta se puede olvidar más y más, en especial eso que hace sangrar el corazón hasta manchar las manos pero es necesario, o de lo contrario el fin de la aventura se ve al fondo de la siguiente vuelta.